Si es que entre los exámenes, que están al caer, y los preparativos de estas fiestas tenía el blog olvidado.
Pero para lo que sí me ha dado tiempo es para comprar mi vestido de noche vieja, la verdad es que me apetecía algo colorido, fucsia o azul, pero este año no hay quien nos saque del negro y como ya tenía uno de cóctel monísimo decidí comprarme solo los complementos.
Esa era mi idea hasta que un día después de clase dando una vuelta por Blanco lo vi, es el típico vestido que no te fijas en él en la tienda, negro de lentejuelas normalito, eso sí en el momento en el que me lo probé me encantó y descubrí que ese tipo de vestidos, con goma en la cintura, le favorecen muchísimo a mi figura.
Escogí un cinturón dorado, aunque mi primera idea era el cinturón de plumas beige de Zara, pero me quedaba enorme en la cintura y no creo que se pueda cortar.
Y por último mis zapatos de Hazel de cuero negro, con charol en la punta y en sus 12.5 cm de tacón, es lo que tiene medir 1.60
Ahora lo único que me falta es el bolso, había pensado en un clutch dorado, pero no lo encuentro en ningún sitio.
Y por cierto ¡Feliz Navidad!
